Limpieza de obra nueva, vida nueva asegurada
Una obra es como una vida nueva y una reforma un volver a empezar.
Vivimos en una ciudad que ha tenido mil vidas y a la que le quedan, por delante, muchos miles más. Barcelona crece en obras a estrenar que han ido ampliando sus horizontes y cambiando su geografía, pero también se transforma y es capaz de darle nuevos significados a lugares antiguos. En Barcelona siempre hay un nuevo comienzo, para algo o para alguien.
Y, si todos los principios están llenos de ilusión, no podemos dejar que se estropeen por pequeños detalles. Porque no olvidemos que los pequeños detalles suelen ser los más importantes, los que marcan la diferencia. ¿Y qué es lo que va a marcar la diferencia cuando entreguemos una obra nueva, o una reforma recién finalizada? Sin duda, que la presentación sea impecable. Y ahí es donde entra la limpieza de fin de obras y de reformas.
La limpieza es un proceso más de cualquier obra o reforma
Vale, nuestro trabajo es la construcción. Levantamos edificios maravillosos, planificamos los hogares más acogedores y eficientes y montamos las oficinas de diseño más vanguardistas. Estudiamos orientaciones, iluminación, eficiencia energética, aprovechamiento de los espacios y elegimos los materiales de las mejores calidades. Además, nos hemos especializado en optimizar los tiempos y en darle la vuelta a cualquier construcción anterior. Viendo cualquier lugar antes y después de la reforma, mucha gente podría decir que hacemos magia.
Pero, después del proyecto inicial, y de llevar a cabo nuestro trabajo sin contratiempos, llegada la hora de la verdad, de la entrega de la obra al cliente, debemos presentarnos con nuestra mejor cara. ¿Y cómo va a lucir esa encimera de diseño que hemos seleccionado, si está llena de polvo? Las obras, en general, crean estrés, incomodidad y cansancio. Así que, tras mucho tiempo de espera, se trata de sorprender al cliente final, de superar sus expectativas, y de que se enamore del que será su nuevo hogar, o su nueva oficina.
Los materiales de construcción, agentes de suciedad masiva

Hay pocas cosas menos posibles que enfrentarnos a cualquier obra sin manchar. ¡Si es colgar un simple cuadro en casa y ya llenamos todo el suelo del polvillo de la pared! (sí, esa arenilla fina que parece que se pega a todo y que es tan difícil de eliminar).
Ahora pongámonos en el contexto de una obra nueva o de una reforma integral. Sí, eso es prácticamente un escenario de guerra. El cemento contra los azulejos, la pintura contra los suelos de madera, la silicona contra las mamparas y el polvo, siempre, contra todos.
Es imposible realizar una obra o reforma sin generar importantes cantidades de residuos y de suciedad, eso lo sabemos todos. Lo importante es ser conscientes de que, una vez finalicemos el trabajo, va a ser imprescindible llevar a cabo una limpieza general de obra, que nunca es una limpieza ordinaria.
La limpieza de final de obra no es una limpieza cualquiera
Muchos clientes nos dicen que, después de una obra, parece que el polvo se reproduce por generación espontánea y que, por más que repasen la limpieza, el polvo no deja de aparecer. Para que esto no suceda, debe llevarse a cabo una primera buena limpieza de fin de obrae higienización.
Limpiar cualquier espacio después de una obra o de una reforma, no es, ni de lejos, como la limpieza ordinaria de un domicilio o de una oficina. En la limpieza de obra nos vamos a enfrentar a polvo, mucho polvo, el polvo más resistente y reincidente del mundo de la limpieza, un ambiente polvoriento producto de derribos, de cortes de diferentes materiales, de mezclas de cementos, de yesos, de lijados…
La limpieza tras la reforma o cualquier limpieza después de obra debe tener en cuenta que va a encontrarse también restos de pintura, de siliconas y de otros materiales, a veces muy pequeños y difíciles de detectar. Además, tenemos que observar la salubridad para garantizar que, a continuación, personas van a ocupar esos espacios para vivir o para trabajar.
También podemos encontrarnos adversarios obstinados, como suciedad incrustada difícil de eliminar y que, además, puede hallarse sobre superficies delicadas, con lo que el proceso se complica. Y después están los agentes invisibles que pueden haberse escondido en el interior de los conductos y que pueden derivar, a la larga, en atascos o malos olores.
Tampoco debemos descuidar a otros duros contrincantes a los que nos enfrentaremos en una limpieza después de una reforma o final de obra, aunque sean transparentes. Sí, estamos hablando de los cristales, esos que se manchan hasta cuando los estás limpiando si no tienes extremo cuidado con los deditos, y que pueden arruinar la iluminación de cualquier precioso interior.
Un servicio de limpieza profesional para un estreno de éxito

La limpieza de obras es un gran reto. Para superarlo de manera satisfactoria, es imprescindible disponer de un protocolo adecuado de actuación, ya que nada se puede dejar a la improvisación o al azar.
Contar con una empresa especializada en la limpieza de fin de obras y de reformas es el modo más eficaz para que el resultado final sea perfecto y, a la postre, acabaremos ahorrando tiempo, dinero y esfuerzo. Y lo que es más importante, tendremos clientes felices.
Cualquier trabajo de limpieza de final de obra o de reforma requerirá de una evaluación previa del servicio, en el que deben analizarse muchos puntos importantes. Tener bien definido el escenario en el que vamos a trabajar, es fundamental para elegir la maquinaria necesaria y los productos más adecuados que debemos emplear. También para asignar el equipo humano que va a encargarse de la tarea, y para hacer una estimación muy precisa del tiempo necesario para desarrollar el trabajo de limpieza de obra.
Por supuesto, el proceso también nos llevará a un punto muy importante para nuestros clientes, la pregunta del millón: ¿cuánto se cobra por la limpieza de fin de obra?Pues mucho menos de lo que se suelen imaginar, y con esta evaluación previa y estudio de recursos necesarios, el presupuesto es siempre muy ajustado.
En ciudades como Barcelona, siempre tan dinámica y en constante crecimiento, nuestra experiencia como empresa de limpieza de final de obra hace que dispongamos de los protocolos más eficientes en función de las necesidades de cada caso y de cada cliente. Así, podemos garantizar que cualquier estreno va a resultar un éxito incontestable.