Todos los clientes de Clean & Home reconocen a Yolanda Parraga como una de las caras más visibles de la empresa y, si hablamos de coraje y capacidad de liderazgo, estamos seguros de que son valores que identificarán, sin duda, con ella. Lo que seguramente no sabrán es que Yolanda nació hace algunos años en Ecuador bajo el signo de Leo, sinónimo inequívoco de esta forma de ser. Los Leo son personas muy generosas, de buen corazón y sumamente protectoras. Su amabilidad y sus ganas de impresionar hacen que todo el potencial creativo que tienen lo pongan a disposición de solucionar los problemas de las personas. Y cada palabra que escuchamos de Yolanda, cada gesto, responde a la perfección a ese fuego leonino.
Yolanda gestiona y supervisa a todo el personal de Clean & Home
Como empresa de limpieza, la coordinación es un pilar imprescindible en nuestra organización. Sea cual sea el servicio que vayamos a realizar, ya sea una limpieza a domicilio, limpieza de empresas, limpieza de oficinas, limpieza de hoteles, limpieza de bares y restaurantes, limpieza de comunidades o de locales, nuestro deber es aportar soluciones rápidas y eficaces a nuestros clientes y eso es, precisamente, la especialidad de Yolanda. Ella, además, realiza estas tareas de modo que el cliente entienda desde el minuto uno que no debe preocuparse por nada. Porque, siendo sinceros, los valores más importantes que una agencia de limpieza como la nuestra debe dar a nuestros clientes son tranquilidad y confianza.
Yolanda comenta que la primera frase que le nace al conversar tanto con particulares como con empresas es: “No te preocupes”. Porque ella misma entiende que no tiene sentido alguno transmitir agobio, ya que el servicio de limpieza no se trata únicamente de dejar un piso brillante, o un mueble completamente lustrado; se trata de trato, de cercanía. De entender y acompañar: es un trabajo social y emocional que mantiene a Yolanda todo el día en movimiento: atiende a clientes, administra el trabajo de las/os empleadas/os, forma a las personas que ingresan a la empresa, analiza con María, CEO de Clean & Home, nuevas alternativas y soluciones de limpieza…
Pero sentarse a conversar un rato con Yolanda, no solo se trata de hablar de la infinidad de variables posibles que nos podemos encontrar en cualquier empresa que se dedique a prestar una empresa de limpieza, sentarse a hablar con Yolanda es, sobre todo, hablar de superación, trabajo duro y compromiso. Es estar mirando a una persona que conoce en detalle el valor de la vida, de los afectos y de nuestras propias convicciones.
Ser de “ningún lado del todo, y de todos lados un poco»
Hace ya veinte años que Yolanda dejó atrás su Ecuador natal para venir a Barcelona, un viaje de muchos kilómetros que hizo cargada con el amor incondicional de su familia, a la que dice sentir “siempre muy, muy cerca”, a pesar de la distancia física. Ella sabe bien que la distancia que importa es la emocional y se encarga de que ésta no exista. Y será que, tanto en su trabajo como en la vida, Yolanda nunca está en un solo lugar porque, como dice el músico Jorge Drexler, ella es de “ningún lado del todo, y de todos lados un poco”.
Yolanda emigró de su país, de su querido Ecuador, pero su capacidad de adaptación y perseverancia han hecho que encuentre un nuevo hogar y una nueva familia en el equipo de Clean & Home.
¿Y qué motiva a Yolanda de su trabajo? “Toda mi vida trabajé atendiendo al público, ya sea cocinando, limpiando o planificando la limpieza de las oficinas de una empresa multinacional, siempre me siento mejor cuando me toca expresarme, aunque sea vergonzosa”. Es curioso que Yolanda se defina a sí misma como una persona vergonzosa, y puede llamar la atención que alguien con esas capacidades comunicativas confiese ser tímida. Pero es precisamente ahí donde comprendemos la fuerza de Yolanda y su compromiso con quienes la rodean. Esa motivación, esa actitud es tan poderosa que sobrepasa cualquier límite.
¿Y fuera del trabajo, qué es lo que le gusta a Yolanda? Pues nos cuenta entusiasmada que, en su tiempo libre, la podemos encontrar montada en su bicicleta mientras recorre el contorno del río Besós o cocinando unas tapas riquísimas y súper innovadoras.
Cada problema es un desafío, un motor.
Conversando un rato con María y Yolanda, es fácil comprobar la magnífica sintonía que hay entre ellas, una suerte a la hora de encajar la filosofía de trabajo de un equipo, pero que pone en valor también ese salario emocional que supone sentirse bien dentro de una empresa. Sobre todo, en las ocasiones complicadas.
María y Yolanda tratan de recordar algún momento conflictivo, una situación que las haya puesto a prueba y que haya desestabilizado al grupo. Tras unos minutos dubitativos, confiesan: “es que lo que parece negativo para un cliente, para nosotras es un desafío, un motor, es un impulso gratificante, es una necesidad que se transforma en resultado”. María continúa hablando:“Yolanda comunica. El cliente le transmite sus inquietudes, y ella lo escucha y le ofrece una solución ajustada a su situación”. Mientras tanto, Yolanda la mira, asiente y finaliza diciendo: “es que somos un equipo”. La palabra “equipo” es una de las que más repite Yolanda durante la conversación. Y no es sencillo encontrar a las personas que tienen la capacidad constante de abstraerse de sí mismas y tener una mirada empática y completamente integral. Y esa es la energía de Yolanda, una persona que se nutre del agradecimiento de una persona que encontró solucionado un problema gracias a su apoyo, su palabra y, principalmente, su esfuerzo.
La fuerza de un equipo
“Es que no hay nada más inspirador que escuchar a mi equipo, porque esta empresa la hacen personas, es una familia, como la que tengo en mi Ecuador”. Tras estas palabras de Yolanda se hace una pausa, uno de esos silencios que lo llenan todo porque lo que acaba de decir abarca una vida entera. Tal vez, varias.
“Ella es la persona que me da la seguridad y la tranquilidad de que todo saldrá bien, de que hay mil formas distintas de llegar a excelentes resultados, que sus ojos pueden ver cosas que el resto del equipo no puede ver”, continúa después María, al cabo de un rato, y Yolanda escucha esas palabras y las agradece con el poder de su mirada tranquilizadora.
Dicen de Yolanda que es un comodín, una navaja suiza polivalente dispuesta a resolver cualquier desafío. Pero no, Yolanda es un as, la carta ganadora que garantiza que el equipo de Clean & Home sea un equipo de éxito, un equipo del que los clientes agradecen, valoran y resaltan el trato humano. Porque detrás de un equipo limpiando, hay un equipo atravesando obstáculos, encontrando estrategias para optimizar tiempos, recursos y así ofrecer soluciones eficientes cuando la situación es adversa. Hablando con María y con Yolanda, uno descubre la fuerza imbatible del equipo que forma Clean & Home y el valor infinito de un “no te preocupes”, esa palmada cálida en el hombro que nos llena de tranquilidad y confianza.
Ojalá podáis tener la oportunidad de pararos un rato a conversar con Yolanda, ya sea en las oficinas de Clean&Home, o dando un tranquilo paseo por la costa del Besós, para sentir esa energía leonina que no tiene más que enseñanzas e inspiración para todas/os nosotras/os.